Elegido por Dios para liberar al pueblo hebreo de la esclavitud egipcia. Líder durante la peregrinación por el desierto. Gran legislador del pueblo hebreo.
Moisés debió haber nacido en el 1525 a.C. Su hermano Aarón tenía 3 años más que él y su hermana, María, también era mayor. Cuando nació Moisés, los hijos de Israel ya estaban en Egipto unos 135 años. Los hebreos se habían multiplicado rápidamente. Como los egipcios necesitaban mano de obra barata para sus construcciones, los tenían sujetos a trabajos forzados. Pero cuanto más los oprimían, "tanto más se multiplicaban y crecían". Entonces ordenaron matar a todos los hijos varones que nacieran.
Al nacer Moisés, su madre lo puso en un arca de juncos en las aguas del Nilo. La visita de la hija de Faraón para "lavarse" en sus aguas, hizo que lo encontrara. La princesa tomó al niño como hijo propio, y contrató a la propia madre de Moisés como su nodriza.
La educación hogareña inculcó en el niño el amor a Dios y el sentido de la misión de su vida. Moisés fue instruido "en toda la sabiduría de los egipcios". Bajo los sacerdotes llegó a dominar las letras, la literatura, las ciencias y la religión egipcia. Le prepararon también para el mando militar y el conocimiento de las leyes. Su aspecto exterior, su vestido, su conversación, su conducta y su cultura pudieron haber sido completamente egipcios, pero su corazón nunca llegó a serlo. Su carácter, su religión y su lealtad siguieron siendo hebreos.
Un día, defendiendo a un hebreo, mató a un capataz egipcio y temiendo las represalias Moisés huyó de Egipto, encontrando refugio en Madián (península del Sinaí, donde habitaban descendientes de Abrahán) Moisés vivió allí muchos años como pastor y con gente hebrea, entre ellos Jetró. Entró al servicio de éste, y con el tiempo su hija Séfora llegó a ser su esposa.
Dios se le apareció en una zarza ardiendo y le encargó que volviera a Egipto para liberar a los hebreos. Dudando de su capacidad, puso a Dios dificultades, pero éste las fue eliminando una a una y Moisés finalmente aceptó la misión de liberar al pueblo, con la ayuda de su hermano Aarón.
Diez plagas cayeron sobre el país antes que el rey dejara salir al pueblo. Con la última, la muerte de los primogénitos, el faraón llamó a Moisés de noche y le dio la orden de que los hebreos salieran del país. Después del paso del mar Rojo, donde Dios se comportó como Salvador de su Pueblo, los hebreos llegaron al monte Sinaí
En el monte, recibió de Dios los Diez Mandamientos. En su ausencia el pueblo erigió un becerro de oro, que estaban adorando cuando regresó. Rompió las 2 tablas. Pero intercedió en favor de Israel, y Dios los perdonó. Después de haber castigado adecuadamente al pueblo. Durante los meses que estuvieron en el Sinaí, construyeron el tabernáculo.
Después de aproximadamente un año junto al monte Sinaí, se codificaron sus leyes, se construyó el tabernáculo y se organizó el culto; luego Israel salió hacia Canaán. El pueblo se rebeló contra Moisés y propuso una vez más regresar a Egipto. Moisés y Aarón pecaron también. Como resultado, se les negó el privilegio de introducir a Israel en la Tierra Prometida. Finalmente acamparon frente a Jericó, que estaba del otro lado del Jordán. Moisés designó a Josué como su sucesor poco antes de su muerte. Con él entraría el Pueblo en la Tierra Prometida.
Moisés debió haber nacido en el 1525 a.C. Su hermano Aarón tenía 3 años más que él y su hermana, María, también era mayor. Cuando nació Moisés, los hijos de Israel ya estaban en Egipto unos 135 años. Los hebreos se habían multiplicado rápidamente. Como los egipcios necesitaban mano de obra barata para sus construcciones, los tenían sujetos a trabajos forzados. Pero cuanto más los oprimían, "tanto más se multiplicaban y crecían". Entonces ordenaron matar a todos los hijos varones que nacieran.
Al nacer Moisés, su madre lo puso en un arca de juncos en las aguas del Nilo. La visita de la hija de Faraón para "lavarse" en sus aguas, hizo que lo encontrara. La princesa tomó al niño como hijo propio, y contrató a la propia madre de Moisés como su nodriza.
La educación hogareña inculcó en el niño el amor a Dios y el sentido de la misión de su vida. Moisés fue instruido "en toda la sabiduría de los egipcios". Bajo los sacerdotes llegó a dominar las letras, la literatura, las ciencias y la religión egipcia. Le prepararon también para el mando militar y el conocimiento de las leyes. Su aspecto exterior, su vestido, su conversación, su conducta y su cultura pudieron haber sido completamente egipcios, pero su corazón nunca llegó a serlo. Su carácter, su religión y su lealtad siguieron siendo hebreos.
Un día, defendiendo a un hebreo, mató a un capataz egipcio y temiendo las represalias Moisés huyó de Egipto, encontrando refugio en Madián (península del Sinaí, donde habitaban descendientes de Abrahán) Moisés vivió allí muchos años como pastor y con gente hebrea, entre ellos Jetró. Entró al servicio de éste, y con el tiempo su hija Séfora llegó a ser su esposa.
Dios se le apareció en una zarza ardiendo y le encargó que volviera a Egipto para liberar a los hebreos. Dudando de su capacidad, puso a Dios dificultades, pero éste las fue eliminando una a una y Moisés finalmente aceptó la misión de liberar al pueblo, con la ayuda de su hermano Aarón.
Diez plagas cayeron sobre el país antes que el rey dejara salir al pueblo. Con la última, la muerte de los primogénitos, el faraón llamó a Moisés de noche y le dio la orden de que los hebreos salieran del país. Después del paso del mar Rojo, donde Dios se comportó como Salvador de su Pueblo, los hebreos llegaron al monte Sinaí
En el monte, recibió de Dios los Diez Mandamientos. En su ausencia el pueblo erigió un becerro de oro, que estaban adorando cuando regresó. Rompió las 2 tablas. Pero intercedió en favor de Israel, y Dios los perdonó. Después de haber castigado adecuadamente al pueblo. Durante los meses que estuvieron en el Sinaí, construyeron el tabernáculo.
Después de aproximadamente un año junto al monte Sinaí, se codificaron sus leyes, se construyó el tabernáculo y se organizó el culto; luego Israel salió hacia Canaán. El pueblo se rebeló contra Moisés y propuso una vez más regresar a Egipto. Moisés y Aarón pecaron también. Como resultado, se les negó el privilegio de introducir a Israel en la Tierra Prometida. Finalmente acamparon frente a Jericó, que estaba del otro lado del Jordán. Moisés designó a Josué como su sucesor poco antes de su muerte. Con él entraría el Pueblo en la Tierra Prometida.